Te contare que estoy de vaca...no vayas a pensar que me he convertido en una vaca, aun me falta algunos kilitos… jejejeje.
Lo que pasa es que mi jefe se ha tomado unas pequeñas vacaciones y para que no me aburra en la oficina, resolvió dármelas a mi también, ¡Qué bueno!...¡No!, no tanto, son vacaciones sin paga, muy clásico de mi jefe por cierto. Muy clásico.
¿Qué semana me esperaba? ya me veía deambulando por la casa como un zombi.
¿Qué voy hacer?
Hasta que se me ocurrió la gran idea, de mandar a mi mama de vacaciones a Trujillo, a visitar a su hermana.
¿Qué, las vacaciones no eran mías?
Sí, pero mi mama tiene una vida complicada en casa, con la cochera y la tienda clandestina, no tiene día de descanso. Ella merece vacaciones.
¡Ya está resuelto!
Sábado 9 de Octubre
Mama viajo a las 10.30 pm y después del bolondrón propio del armado de maletas, todo ha quedado en calma.
10.45 pm
Todo iba bien hasta que comenzó a sonar el timbre, entre la venta de cerveza y la recepción del último auto a las 4.30 de la madrugada. Dormí solo una hora.
Domingo 10
El despertador sonó a las 6.00 am. La cochera debe ser atendida nuevamente. Cuando creía que podía pegar el ojo un ratito...rinnnnggggg el timbre me levantaba de mi cama. La trasnochada me había dejado trapo y seguía dejándome trapo.
Lunes 11:
Hoy me he sorprendido, mis ojos se abrieron a las 5.58 am
¡Le gane al despertador!
Aun un poco zombi, por la trasnochada del sábado, fui al mercado. Un hecho extraño, porque casi nunca voy (tengo una madre autosuficiente)
Martes 12:
Estoy haciendo un curso de supervivencia, ya van dos días que almuerzo tallarines verdes, un día mas y creo que va a dejar de ser mi plato favorito...
Miércoles 13:
Me mordió Reyna, mi adorada cocker, en la pierna derecha. ¿Cómo? trate de evitar una pelea con locki, parece que se equivoco (eso espero)y termino mordiéndome a mi…¡Que dolor!
He desempolvado mi cerámica al frió y estoy haciendo algunas cositas.
Jueves 14:
Se rompió la cañería del agua de la cocina. Imagínate tratando de tapar el hueco de la tubería con mi dedo ¿Dónde está la bendita llave? Tuve que correr a la calle, superar mi miedo a las arañas y cerrar la llave general. Como supondrás fue un día de locos.
Viernes 15:
Mientras espero que los propietarios de los autos se retiren de la cochera, ya que algunos son muy demorones, he comenzado a leer un libro “El extranjero” de Albert Camus.
Sábado:
Bendita rutina, espero que esta semana no me muerda el perro y que no se me rompa otra cañería.
Por cierto, mi mama se quedara una semana más de lo pactado y yo estaré por aquí una semana más…

Repasando la rutina diaria:

1. Abrir la puerta de la cochera como mínimo 46 veces al día, desde las 6.00 am hasta las 12.30pm; horario que impuse yo, ya que los usuarios estaban mal acostumbrados y llegaban cuando les daba la gana.
2. Darle de comer a los periquitos (12 jaulas), 1 agaporni, 2 loros, una gallina ponedora de huevos, además la tengo que vigilar constantemente para que no se coma los dichosos huevos. Esta gallina si sabe apreciar los huevos de corral.
3. Pensar en ¿Que cocinare? y COCINAR. Yo siempre he sido algo practica, pero no sé hasta cuando pueda vivir comiendo pollo frito y tallarines verdes.(Mama me dejo la refri atiborrada de espinaca)
4. Atender a los eventuales clientes de la tienda clandestina.
5. Asear la casa, lavar la ropa, etc. Lo necesario para no morir en el intento.
6. Hacer algo que me guste, escribir en la compu., manualidades, etc., (claro mientras veo tv en español)

En casa las horas NO pasan volando...

Las horas pasan volando y... ¿Sabes?, aun no he podido ir a correr, siempre hay mil excusas, la hora, el frió, el cansancio. Si, han pasado varios meses...Mira, hasta Locki, mi perrita, esta gorda, y yo...ni que decir, también he subido unos kilitos...je, je, je y todos en el lugar equivocado.

¡¡¡La compu tiene la culpa!!!

Últimamente he pasado mucho tiempo frente a la compu, mi viejita Pentium II,¿QUE? SI, pentium II... ¿Arcaica? Shhhh... No hables así de ella, La pobre hace lo que puede, hace poco perdió su la tarjeta de sonido y..Ha quedado muda...Pero ahí va. Pero este es otro cuento.
Volviendo a mi mayor angustia:
¡Tengo que salir a correr!....Sí, ya se, el problema está en el inicio de la rutina, martes, jueves y sábado... ¿Te dije que salía a correr con mis dos perritas?
Tengo dos, una cocker blanca con caramelo y una ladradora, ¿labradora? ¡No! LADRAdora..
Ellas son algo nerviosas y para salir a la calle se arma un escándalo de padre y señor Mío, se supone que el líder de manada debe salir primero por la puerta "osea Yo", cosa que no entienden mis perritas. Mi pequeño cocker se empecina en salir primero. Estoy en ese plan cerca de 15 minutos entrando y saliendo de mi casa.

Una vez que decido que ya basta de lecciones de liderazgo y empiezo la caminata, es pan comido.¿ Alguien dijo pan? Me gusta el pan calentito....

Bueno, bueno…Volvamos a nuestro asunto; Tengo que ser líder de manada y ponerme fuerte. YO ser Líder, YO ser Líder, YO ser Líder...repetir lo necesario como para creérselo.
Según el encantador de perros todo es cuestión de energía. Pero debo confesar que por estos días mi energía esta algo baja y mi pequeño cocker me ha suplantado y camina por allí con unos aires...

Una vez afuera son tres los problemas que tengo que afrontar:
1. Los gatos.
Cuando paso frente a una tienda, son los gatos una gran tentación. Mis perritas, especialmente locki los quiere mucho, pero los quiere almorzar. Y allí debo de tener cuidado porque los gatos ya le han metido un par de arañazos en su narizota.
¿Te has preguntado por qué hay un gato en cada tienda?
Ratones, sin duda.
2. Las combis asesinas.
Son un problema mortal, esta es una de las razones por la que tengo que llevar a mis perritas con correa y solo cuando llego a la playa las libero para que puedan olfatear y perseguir gaviotas.
3. Los perros callejeros.
A veces uno que otro perro callejero quiere atacar a mis niñas, tengo que estar atenta y ponerme al frente, ¡Hey no te atrevas! somos tres ...me planto al frente y visualizo..YO SOY MAS GRANDE, MAS FUERTE, ETC...Si no funciona recojo una piedra invisible y listo ¡Todos los perros reconocen el ademan de recoger una piedra! y esa no falla.

Espero volver a correr, a enfrentarme a los gatos, los perros callejeros, las combis asesinas, y sobre todo enfrentarme a esa pereza que se apodera de mí a las 6.30 de la mañana.